El estudio de Zambrano sobre la razón moderna, permite profundizar en la crisis de la cultura contemporánea, y cuya expresión absolutista de la libertad sería una de las causas del nihilismo en Occidente. Según Zambrano esta situación es manifestación de una crisis religiosa con efectos en lo político, por ello -sostendrá- la necesidad de desterrar el carácter sacrificial del poder totalitario respecto del sujeto particular, único modo de superar la trampa de la filosofía moderna que entiende la vida "instalada en el lugar del conocimiento" (El hombre y lo divino).